Wormwood: putrefacto caballero (Vol.1)
Autor: Ben Templesmith
Editorial: Kraken Ediciones
Formato: 208 páginas, color, tapa dura.
Año de publicación: 2017
Precio: 25€
Wormwood es una especie de gusano
intergaláctico, interdimensional, inmortal y juerguista aficionado a la buena
cerveza negra, las strippers y la mayoría de los vicios que el planeta Tierra
ofrece. Ah, sí… y usa un cadáver como traje. Junto a Mr. Pendulum, su robótico
compañero de borracheras, y Phoebe, su nueva empleada, se enfrentarán a
criaturas diabólicas que anidan en humanos, a repugnantes leperchaunts y la
venganza de la Hermandad de los Calamares.
Puestos a recomendar lecturas
horroríficas por estas fechas, no podíamos pasar por alto a Ben Templesmith, el irreverente artista
australiano artífice de títulos como 30
días de noche o Criminal Macabre y
uno de los máximos exponentes en cuanto a relatos de horror grotesco.
Aunque Wormwood: putrefacto caballero ya llegó a nuestro país hace unos
cuantos años, debemos agradecer a Ediciones
Kraken tenerlo de vuelta en nuestras estanterías para nuestro deleite y
regocijo, de hecho, Wormwood es una
de las creaciones más gamberras y divertidas salidas de la mente del
australiano, quizás no apta para los estómagos más sensibles, pero capaz de amalgamar
una extraña mezcla de comedia, acción, horror, incorrección política y mucha
mala baba.
Wormwood es un soez juerguista
irredento que malgasta su tiempo haciendo las cosas que haría un tipo de su
calaña: beber mucha cerveza, incordiar a la gente y frecuentar el club de streaptease
de su amiga Medusa. Pero en su compañía y en un oscuro mundo poblado por criaturas
grotescas los problemas no tardarán en surgir. Una extraña plaga de parásitos
diabólicos ha roto su rutina en el club de streaptease y ahora amenaza con
extenderse por toda la ciudad. Es momento para ponerse manos a la obra y cazar
algunos bichos, claro que… la falta de tacto de Wormwood y su falta de respeto le
ha granjeado no pocos enemigos. Quizá salvarle el culo a la ciudad no sea una
tarea tan sencilla como esperaba.
Solo Templesmith es capaz de
transmitir esa inusual sensación que se mueve entre el divertimento y el
desagrado, gracias a su inimitable estilo narrativo y gráfico, libre de
autocensuras y capaz de explorar los caminos de lo macabro siempre a favor de
sus historias. Gran peso cobra en ello un apartado gráfico brumoso y
desdibujado en el que maneja con maestría las paletas de colores, con las que
crea unas atmósferas opresivas que se mueven entre lo gélido inhumano y los entornos
más viscerales y cálidos.
Pero Wormwood: putrefacto caballero es tan solo el primer escalón en
esta inusual serie que en la actualidad ya goza de un Volumen 2, ambos números publicados
por Ediciones Kraken al notable pero
merecido precio de 25€ cada uno, en
un cuidado formato de tapa dura. Y que más recientemente ha visto editado un imprescindible
nuevo capítulo bajo el título de Wormwood va a Washington, también en
formato de tapa dura y al precio de 22€.
En resumen, una serie más que recomendable
para los aficionados al género del horror, que además deseen echarse unas risas
con el humor más irreverente. Un título que esta semana os recomiendo con mi sello de aprobación del Capitán
Latinoamérica.
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